Estoy en plena revisión de la novela, ese momento en que se lee una y otra vez con mirada crítica, en el intercambio constante con la correctora. Publicar una obra con fallos es uno de los mayores temores para cualquier autor, y se intensifica si uno decide autopublicarse. Ya de por sí es un desafío abrirse camino y demostrar que esto va en serio, no como un pasatiempo ocasional.
De pronto ocurre. Lo ves. Y el corazón se detiene. Sientes un crujido interno, como si algo se quebrara por dentro. Como si una torre levantada con esfuerzo se viniera abajo. Detectas un error. Pero no en el nuevo manuscrito, sino en el anterior, el que lanzaste hace un año. Ese que revisaste decenas de veces. El que pasó por tus ojos, por una correctora, por personas cercanas. Y sin embargo, ahí está, como una herida mínima pero punzante. Quisieras culparte, recriminarte no haberlo visto antes, haberlo dejado pasar tanto tiempo. La estructura que habías levantado con dedicación parece tambalear. El ego se cae como la torre en el tarot, para recordarte que aún estás aprendiendo.
Entonces respiras. Reconoces que solo queda corregir y avanzar. Como tantas veces sucede en la vida. Porque lo que realmente importa es el compromiso con hacerlo bien. Y si no sale perfecto a la primera, al menos seguir intentándolo y mejorar cada día.
Aceptar los fallos. Honrar a tus versiones anteriores, con sus imperfecciones incluidas. Agradecer a todas las torres que cayeron por haberte traído hasta aquí. Porque gracias a ellas eres quien eres hoy: alguien que persiste, incluso cuando todo se desmorona.
Este jueves inicia la preventa de El perfume de Nina, una historia sobre segundas oportunidades. Sobre todo lo que somos capaces de alcanzar si confiamos en nosotros y soltamos a quienes no supieron vernos. Porque caer, equivocarse y volver a levantarse también es avanzar. Y leer, siempre, es una forma de seguir soñando.
Si te gustan estos temas y estás en Madrid, te invito a que te sumes a mis talleres de Tarot literario, donde unimos Tarot y literatura. Será en el lugar más mágico del centro: La Botica de las Letras este 17 de julio. Si quieres más información, responde a este mail o deja un comentario.
¡Y que la magia nunca se pierda!
🕊️ Gracias por estar. Si sientes que este espacio también es tuyo, te espero del otro lado: @Eriwords
Pd1: Puedes compartir las frases que más te gusten de este mail en tus historias de Instagram (etiquétame), y también puedes reenviar este correo a quien creas que le puede servir.
Pd2: Puedes conseguir mis libros aquí para apoyar mi escritura.